borracho. Casi todos los hombres i muchas mujeres siguieron su mal ejemplo i se vió lo que hasta entónces nunca habia sucedido.
"Los ancianos i los niños se morian de hambre.
"Como los hombres solo atendian a satisfacer sus vicios, ya no trabajaban; no tenian casi que dar en cambio de bebidas i alimentos.
"Solo pensaban en beber i estar con mujeres malas.
"En vano el buen encantador que protejia al antiguo cacique amenazaba a su hijo. Este continuaba siempre lo mismo, llegando hasta echar a su madre, ya mui anciana, de su casa.
"El hambre era cada DIa mayor. Lo poco que habia lo tenia el cacique.
"En estas circunstancias fué su madre, que pereció de necesidad, a pedirle una limosna.
"Apénas la vió, en lugar de darle de comer, le animó los perros que solo a él conocian i que la destrozaron, lo mismo que a otras pobres mujeres que la acompañaban.
"Inmediatamente apareció el encantador, en medio de truenos i relámpagos; el dia, que estaba claro, se puso mas oscuro que la noche; la tierra tembló i comenzó a hundirse.
"En seguida, el encantador convirtió al cacique en el toro negro que habita la cueva.
"Apénas lo hubo castigado así, el suelo se quebró como si fuera de vidrio, tragándose a todos, i apareció la laguna.
—Por esto es que miraba, continuó, a ver si po-