meno duró poco mas de cinco minutos, atenuándose al paso que ensanchaba su base, desapareciendo del todo al costado de la citada isla i dejando tan solo un círculo blanquecino en el último punto que ocupó su pié.
Cuando se encontraba en su mayor vigor, parecia que exhalaba penachos de humo que, al salir del borde superior, desaparecian casi instantáneamente. La altura del torbellino talvez no pasaria de veinte metros con un diámetro de diez. Muchos de los tripulantes de los botes que rodeaban al Callao creyeron era el vaporcito de Quillahua, álias el Traga-Olas, que volvia incendiándose.
El tiempo habia sido bonancible del NO. i en el momento del fenómeno continuaba lo mismo. Algunas gotas de agua se desprendian de una gran nube, mui densa, que colgaba en forma de casquete esférico i bajo la cual jiraba el torbellino. El resto dal cielo lo cubrian densos cúmulos i opacos celajes.
La nube que coronaba el fenómeno parecia bien baja i talvez pudiera asegurarse que no pasaba de 150 metros de altura. Su borde inferior no era preciso como el de las que alimentan los grandes torbellinos denominados trombas marinas. Mirada desde mayor distancia, habríase creído idéntica; pero a la corta que nos separaba de ella, se hacia notar en contorno del borde negro i denso, algo como una gaza plomiza de corto espesor.
Fenómenos como el que hemos descrito no son tan raros en nuestro litoral i creemos que ellos son el verdadero oríjen de las trombas que suelen acercar nuestras costas australes. Al efecto, citaré aquí un fenómeno idéntico que me fué posible observar el 12 de noviembre de 1865 [1].
El 9 de noviembre del ano citado, la corbeta Esmeralda i el vapor Maipú y que volvian de las Chinchas navegando en convoi i a la vela, se separaron a la una de la tarde del mismo dia; la primera con rumbo a Arauco i el segundo con destino a Chiloé, rumbo al SSE. i vientos flojos del oeste. Tres días despues, el 12 a las 4h P. M., se dejaron ver desde el Maipú dos torbellinos de vapor, color de leche, que cruzaban por su proa con veloz carrera, en sentido del ONO. al ESE. Jiraban de izquierda a
- ↑ Datos tomados de mi Diario de mar.