sedimentarias que por el oriente i el norte circunscriben el golfo de Reloncaví i que por el occidente están representadas por las islas del archipiélago de Chiloé, siendo todo la continuacion del valle central de Chile. Estas lomas, sobre cuya formacion tantas hipótesis se han emitido i se emiten aun, tienen una altura variable, pero jeneralmente comprendida entre 25 i 400 metros, i a causa de su suave declive i situacion están llamadas a desempeñar mas tarde un rol importante, pues con el tiempo i a medida que la poblacion lo exija, se harán el centro de grandes sembrados i cultivos. Están compuestas, lo mismo que aquellas que resguardan por el norte a Melipulli, de capas de arcilla i de arena, que tienen a veces un espesor de cinco i mas metros i parece que hubieran sido depositadas por una corriente mui suave a juzgar por lo pulverizado de los materiales, lo que inclina a creer que se tiene a la vista una formacion lacustre.
Las arcillas ofrecen a veces una estratificacion fria i mui visible, pudiendo notarse, que capas colocadas a cincuenta o mas metros de la superficie del terreno, esperimentan ya un primer grado de consolidacion. Otro tanto sucede con las arenas, las cuales afectan así tal semejanza con las cancaguas de Ancud, que no repugna absolutamente atribuir a éstas un oríjen idéntico. Es mui posible que la única diferencia que exista entre ámbas, a mas del grado de consolidacion, sea la naturaleza de las arenas, siendo las primeras mas graníticas que volcánicas i las segundas al contrario; pero de ninguna manera puede admitirse que las cancaguas sean solo cenizas volcánicas consolidadas, pues mas de una vez he tenido ocasion de observar en ellas cristales de anfíbola i de feldspato, al paso que en las arenas de las islas i del continente se encuentran en grande abundancia detritus de lavas, escorias i cenizas volcánicas mezcladas a los elementos triturados del granito.
De paso citaré que a unas dos millas al sur de la colonia existen várias cuevas escavadas por las olas del mar. Estas escavaciones se observan tambien en algunos islotes del archipiélago de Chiloé que se perforan a veces completamente i simulan los arcos de un puente.
Su forma caprichosa es debida talvez a que el terreno perforado es ménos consistente que el que le rodea, i se destruye, de consiguiente, con mas prontitud. Las grutas de esta naturaleza