Página:Historia de un amor turbio - Los perseguidos (1908).pdf/146

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página no ha sido corregida
146
Historia de un amor turbio

cuadro sostenido suspendiale la respiración hasta recobrarla violentamente al llegar al límite de su tolerancia imaginativa.

Por fin llegó á Constitución y tomó el tramway, momentáneamente distraído; pero una vez inmóvil, con verdaderos asaltos de súbito modo de ver el análisis torturante recomenzó. Lo que dominaba sin embargo era el odio al otro, el acceso violento de destrozar al que nos tocó á nuestra mujer. Y bajo esto, la seguridad personal adquirida en esos momentos y que siempre había supuesto en los maridos más ostentativa que real—de matar á su mujer el primer día que pudiere darle verdadero motivo de celos.

Comenzaba á apaciguarse. «Lo que me daña no es que haya tenido novio y que éste haya tratado de hacer lo que todos, sino el no habérmelo dicho antes. Qué pudiera haberle respondido si al principio me dice sencillamente que había tenido novio? Pero ca-