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HISTORIAS

Parece que el dia... del mes de..... (no recuerdo de fijo la fecha).upa multitud ipmensa estaba reunida , con objeto que no espedifitan , en la gran plaza de la Bolsa de la hermosa ciudad de Rotterdam. La estacion hacia que aquel dia estuviese muy caluroso: no corria un soplo de aire, y la muchedumbre nņo parecia descontenta .de sentirse de vez en cuando majadą por la Įluvia de algunos minutos que se desprendia de las vastas masas de nubes blancas-abuadantemente dispersas por læ bóveda azul del firmamento.

A eso de las doce del dia se manifestó en la asamblea una ligera, pero notable agitacion , seguida del murmullo de diez mil lenguas; un minuto despues diez mil semblantes se dirigieron hácia el cielo , diez mil pipas bajaron desde el ángulo de diez mil bocas ,'y un grito. que solo puede ser comparado al rugido del Niágara, resonó prolongada , alta y furiosamențe en toda la ciudad cercaníasy sus No tardó en descubrirse el orígen de este alboroto. Vióse desembɔcar y entrar en una de las lagunás de la estension azulada , del fondo de una de aquellas vastas masas de nubes de contornos vigarósamente definidos, un ser estraño , đe apariencia sólida, tan singular'mente configara- đa , tán fantásticamente organizađa, que la' multithd de las bienos veofnos que lo miraban desdđe abajo , con tanta þoča, abierta', no podia absolutamente comprender nada, ni eansarse de admirarlo.

—- 2Qué podia ser? Eg nömbre de tbdas los diablos de Rotterdam, ique podia presagiar aquello? Nadie heterogéneo,