por aquel grande y espantoso desierto que vísteis camino de la montaña del amorrheo , como Dios nuestro Señor nos habia mandado ; y estando ya en Cadesbarne ,
20 os dije : Habeis llegado á la montaña del amorrheo , de la cual nos ha de dar Dios nuestro Señor la posesión.
21 Mira, oh Israél, la tierra que te da tu Señor Dios : sube y ocúpala como Dios nuestro Señor lo prometió á tus padres : no tienes que temer , ni alarmarte por nada.
22 Y acudísteis á mí todos , y dijisteis : Enviemos personas que reconozcan la tierra, y nos informen por qué camino debemos subir Num. XXI. v.24.</ref>, y á cuales ciudades encaminarnos.
23 Habiéndome parecido bien el pensamiento, despaché doce hombres de entre vosotros , uno de cada tribu.
24 Los cuales puestos en camino , habiendo atravesado las montañas llegaron hasta el valle del Racimo ; y reconocida la tierra ,
25 cogiendo de sus frutos para muestra de la fertilidad , nos los trajeron , y dijeron : Buena es la tierra que el Señor Dios nuestro nos ha de dar.
26 Mas vosotros no quisísteis subir ; antes bien incrédulos á la palabra de Dios nuestro Señor,
27 murmurásteis en vuestras tiendas y dijísteis: El Señor nos aborrece , y por eso nos sacó de la