Página:La Sagrada Biblia (XIII).djvu/301

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página ha sido corregida
293
 
CAPÍTULO XI.
De la oracion dominical: perseverancia en orar: Demonio mudo. Blasfimias de los judíos: parábola del valiente armado. Reprende Jesus á los Fariseos y doctores de la Ley. (Matth. 5, 6, 7, 9, 12, 21, 23. Marc. 3, 4, 11, 12. Joann. 14.)

1 Un dia estando Jesus orando en cierto lugar, acabada la oracion, díjole uno de sus discípulos: Señor, enséñanos á orar, como enseñó tambien Juan á sus discípulos.

2 Y Jesus les respondió: Cuando os pongais á orar, habeis de decir: Padre, sea santificado el tu nombre. Venga á nos el tu reino.

3 El pan nuestro de cada dia dánosle hoy.

4 Y perdónanos nuestros pecados, puesto que tambien nosotros perdonamos á nuestros deudores. Y no nos dejes caer en la tentacion.

5 Díjole tambien: Si alguno de vosotros tuviere un amigo, y fuese á estar con él á media noche, y á decirle: Amigo, préstame tres panes,

6 porque otro amigo mio acaba de llegar de viage á mi casa, y no tengo nada que darle;

7 aunque aquel desde adentro le responda: No me molestes, la puerta está ya cerrada, y mis criados estan como yo acostados, no puedo levantarme á dártelos;

8 si el otro porfía en llamar y mas llamar; yo os aseguro que cuando no se, levantare á dárselos por