el apostolado para someter á la fé por la virtud de su nombre á todas las naciones,
6 entre las cuales sois también contados vosotros, llamados á ella por Jesu-Christo:
7 á todos aquellos que estáis en Roma, que sois amados de Dios, y santos por vuestra vocación, gracia y paz de parte de Dios nuestro Padre, y de nuestro Señor Jesu-Christo.
8 Primeramente yo doy gracias á mi Dios por medio de Jesu-Christo acerca de todos vosotros; de que vuestra fé es celebrada por todo el mundo.
9 Dios, á quien sirvo con todo mi espíritu en la predicación del Evangelio de su Hijo, me es testigo de que continuamente hago memoria de vosotros,
10 pidiéndole siempre en mis oraciones que, si es de su voluntad, me abra finalmente algún camino favorable para ir á veros.
11 Porque tengo muchos deseos de ello, á fin de comunicaros alguna gracia espiritual, con la que seáis fortalecidos:
12 quiero decir, para que hallándome entre vosotros, podamos consolarnos mútuamente los unos á los otros, por medio de la fé, que es común á vosotros y á mí.
13 Mas no quiero, hermanos, que dejéis de saber, que muchas veces he propuesto hacer este viage, para lograr también entre vosotros algún fruto, así como entre las demás naciones; pero hasta ahora no me ha sido posible.