I en la melancolía
De la lejanía
Raya el negro-azul del infinito
La serpentina de oro de un aereolito.
Un carnaval veneciano,
Con algo de «Fétes Galantes»
Con algo mui verleniano
Avec plusiers des amantes.
Una góndola un cisne mitolójico miente
Al pasar desgranando suspiros de violines
Entre la sombra vaga i quedamente,
Llena de Colombinas i Arlequines.
Resbala por encima del barco que navega
Una paloma blanca que mancha el horizonte,
Una biznieta noble de la paloma griega
Que llevara a Batilo recuerdos de Anacreonte.
En los canales anchos donde la luna llueve
El barco se desliza cual patinando en nieve,
Se escapan de su fondo chanzonetas amargas
I va estelando el agua con dos ojeras largas.
Lloriquean los violines
Se quejan los mandolines.