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LA INQUIETUD DEL ROSAL
¡Venid! Llevadme pronto a correr el albur!...
¡Qué lástima, pequeñas, que no tengáis las alas
Tejidas en azul!
¡Venid! Llevadme pronto a correr el albur!...
¡Qué lástima, pequeñas, que no tengáis las alas
Tejidas en azul!