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Señora, mi corazón
Es una copa vacía,
Llenádmela de perfumes
Con besos y con caricias,
Y cuando rebose al fin
En esencias exquisitas,
La verteré a vuestros pies
En guirnaldas de poesía.
Señora, mi corazón
Es una copa vacía,
Llenádmela de perfumes
Con besos y con caricias,
Y cuando rebose al fin
En esencias exquisitas,
La verteré a vuestros pies
En guirnaldas de poesía.