110 MANUAL DE LA INFANCIA
2. Cuando se han de separar palabras ó frases aná- logas, si no están unidas por conjunción; v. gr.: La caridad es dulce, paciente, bienhechora. Odiar el tra- bajo, mentir con frecuencia y cometer faltas de respeto, son señales de un corazón envilecido.
3.” Antes y después de palabras, frases y oraciones intercaladas; v. gr.: D. Juan, de ¡lustre alcurnia, bri- Ud por sus virtudes. No me cansaré, pues, de repetirlo. Pienso, sin embargo, marchar... El hombre, que fué criado para ser semejante á Dios, no debe envilecerse....
4.” Para indicar la supresión de un verbo; v. gr.: La castidad hace al joven semejante á un ángel; la im- pureza, d inmundos animales,
5.” Después del ablativo absoluto; v. gr.: Quitada la causa, desaparece el efecto. :
Punto y coma.
P.—En qué casos debe ponerse punto y coma? R.—En los siguientes:
1.” Delante de las conjunciones adversativas; v. gr.: Es joven, es noble, es rico; pero libertino. Pero si la cláu- sula es corta bastará una coma; v. gr.: Vino ayer, pero se marchó pronto.
2.” Para separar los miembros principales de un pe- riódo, silos no principales piden coma; v. gr.: Encapo- tóse el cielo, como si fuera noche; soplaron los vendavales, como alardeando de su furia impetuosa; levantúronse las olas embravecidas, como montes empinados; y la frágil navecilla...
3.* Para separar las oraciones en el estilo cortado; v. gr.: Te rodeaste de amigos perversos; disipaste pronto tu herencia; mataste todos los sentimientos nobles...
