Página:Obras de Leandro Fernández de Moratín - RAH (Tomo I - Parte I).djvu/115

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Notas.


    cantaron durante algunos años en la catedral de Sevilla. Séame lícito con este motivo exponer mi opinion acerca del Libro de las querellas, y el de El Tesoro. No creo que estas composiciones sean de Alfonso X. Cualquiera que tenga conocimiento de los progresos de la lengua y poesía castellana les dará dos siglos menos de antigüedad. Si las coteja con las demas obras en verso de aquel rey hallará mas fundada esta asercion, y si reflexiona que se hallaron entre los manuscritos del marques de Villena, sospechará quién pudo ser el verdadero autor, y á cual época pertenecen. Hecha ya mencion de los primeros autores de nuestra poesía vulgar, no es de mi propósito continuar la serie de todos ellos. Velazquez habló de esto, y despues de él D. Tomas Sanchez añadió cuantas noticias pudo adquirir su diligencia.

    (4) Los yoglares y yoglaresas. Juglar del latin jocularis, músico de instrumento y voz, pantomimo y representante. La primera indicacion que he podido hallar acerca de los juglares en España, se encuentra en la crónica general, en donde hablándose del casamiento de las hijas del Cid con los condes de Carrion (que debió ser hácia el año de 1098) se refiere que los juglares intervinieron en las fiestas celebradas en Valencia con aquel motivo. Lo mismo se verificó despues cuando el Cid casó otra vez á sus hijas con D. Ramiro, infante de Navarra, y D. Sancho, infante de Aragon, segun refiere tambien la citada crónica. En un privilegio dado en Burgos por Alfonso VII en el año de 1136 firma entre otros un juglar con estas palabras: Pallea juglur confirmat. En los siglos posteriores se hace frecuente mencion de los juglares, á este fin pueden verse las Leyes de Partida, las obras de Berceo y Joan Lorenzo, el manuscrito de