BPICTETO.-MÁXIMAS.
387 puede resistir á tu supremo poder. En una hora ve destruídos todos sus designios y con ellos cae en manos del destino.»
LXXVI.
También dirás algunas veces estas palabras: «El que sabe ceder á la necesidad, No duda en el secreto de la Divinidad.»
LXXVIII.
Mas acuérdate sobre todo de aquellas hermosas palabras que dijo Sócrates (estando en la cárcel) á „su amigo Criton. «Amigo querido; si los dioses amenazan mi vida con las funestas señales de una horrible tempestad y si han resuelto la sentencia de mi muerte, mi espíritu se somete .sin resistir. No pretendo, no (á pesar del destino), prolongar mis .años. Mis dos fieros enemigos, Anito y Melito, son dueños de mi vida y me la pueden quitar. Mi cuerpo, flaco y mortal, les obedece; pero mi espíritu ¡oh Criton! está libre de su poder, y aunque su vano furor se vuelve contra mi, no me podrán privar de mi fe ni de mi virtud. »