tencia que conduce à la conservacion de las desviaciones de estructura ó de instinto ventajosas; y por último, que pueden haber existido gradaciones, todas buenas cada una por su estilo, en el estado de perfeccion de cada órgano. No puede disputarse, á mi juicio, la verdad de estas proposiciones. Es, sin duda, difícil con extremo, áun conjeturar sobre las gradaciones por las cuales se han perfeccionado muchas estructuras, sobre todo, entre los grupos de séres orgánicos interrumpidos y que presentan claros por haber sufrido mucha extincion; pero vemos tantas gradaciones extrañas en la naturaleza, que debemos de ser extremadamente cautos al decir que un órgano, ó un instinto, ó una estructura entera, no pueden haber llegado á su estado actual por muchos pasos intermedios. Hay casos, necesario es reconocerlo, de dificultad especial, opuestos à la teoría de la seleccion natural; y uno de los más curiosos de éstos, es la existencia en la misma comunidad de dos ó tres castas definidas de hormigas obreras ó hembras estériles; pero he intentado demostrar cómo pueden zanjarse estas dificultades. Con respecto á la casi universal esterilidad de las especies cuando por primera vez se cruzan, que forma contraste tan notable con la casi universal fertilidad de las variedades cuando se cruzan, debo referir al lector à la recapitulacion de los hechos dados al fin del capítulo IX, los cuales paréceme á mí que demuestran conclusivamente que esta esterilidad no es un atributo especial, ni más ni ménos que no lo es la incapacidad de dos distintas clases de árboles para ingertarse, sino qque es una incidencia de las diferencias limitada á los sistemas reproductivos de las especies que se cruzan. Vemos la verdad de esta conclusion en la enorme diferencia en los resultados de cruzar las dos mismas especies recíprocamente, esto es, cuando -una especie se usa primero como padre y luego como madre. La analogía de la consideracion de las plantas dimorfas y trimorfas, claramente nos lleva à la misma conclusion, porque se unen ilegítimamente las formas dan poca semilla ó ninguna, y las crias son más ó ménos estériles; y estas formas pertenecen á las mismas especies indudables, y en nada se diferencian más que en sus órganos reproductivos y sus funciones. cua Aunque la fertilidad de las variedades cruzadas y de su mes-
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Apariencia