justo delante de los hombros para perforar su corazón, la multitud gritándole que lo matara con en el primer golpe. La espada se dobló casi por mitad al golpear un hueso, y se fue por un lado. El matador paró para enderezarla otra vez, y mientras tanto el toro ahora sangrado se fue contra uno de los picadores a caballo. El picador bajó su lanza para picar al toro en el hombro, y el momento que el pico hirió la piel del pobre animal, como es su costumbre, se fue lejos. Esto se repitió otra vez y otra vez, y entonces el matador le dio una docena de estocadas, finalmente tocando un punto vital, y se inclinó a los jueces; la turba en las galerías del lado opuesto, recompensando su habilidad y de coraje (?) aventándole cáscaras de plátano, naranjas, verduras podridas a la cabeza cuando se acercaba. Un asistente le clavó una daga de doble filo al toro moribundo en el cuello, y la criatura cayó muerta como si golpeada por un rayo. Entonces, tres viejos caballos, con arnés fueron llevados y amarraron, el cuerpo sangrante, pero requirieron la fuerza unida de todo el grupo de "artistas" para ayudar a jalarlo afuera.
La banda tocó, y el segundo Toro llegó corriendo. La pelea, si tal puede llamarse, fue simplemente una repetición del primero. El tercer Toro se escapó de los caballos, y sólo pelearía en legítima defensa, corriendo alrededor de la arena con la cabeza en alto, como si apelara por misericordia, y el público ahora enfurecido gritaba fuerte y mucho "Sáquenlo," lo que finalmente se hizo por orden de los jueces.
El cuarto Toro fue un compañero dispuesto, e hizo cosas animadas. Embistió todo a su alcance, y llevó a los asistentes una y otra vez detrás de las barreras. El público, emocionado al punto más alto de