tiempo tuviéron los gentiles á los bosques sagrados, es decir, que los miran de léxos, y no se acercan á ellos. Me inclino á creer, á lo ménos respecto de Platón, que es por no conocerle, y estoy persuadido, que si se revolviesen á leer sus diálogos, tendria tantos admiradores como lectores.
El mas hermoso é interesante de todos es el que escribió sobre la justicia, conocido comunmente con el nombre de la República. Es el que trabajó con mas cuidado, y no cesó de limarle y retocarle hasta los ochenta años cumplidos. Despues de su muerte en un manuscritos de su República, se encontro el exordio mudado de veinte maneras; sin duda porque no queria que la doctrina de Sócrates perdiese en sus escritos aquella fuerza y gracia que tenia en boca de su maestro. En general no hay cosa mar harmoniosa y divina, que la colocacion de las palabras en Platón; y si en la eleccion hubiese sido tan felíz, seria igual á Homero, y superior á todos los otros. Su imaginacion bella y fecunda alimentada con las enérgicas frases de los oradores, y enriquecida