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el recuerdo de los bellos ojos luminosos de mi Annie....
1849
ELDORADO
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Brillantemente ataviado, un galante caballero, viajó largo tiempo al sol y a la sombra, cantando su canción, a la busca del Eldorado.
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Pero llegó a viejo, el animoso caballero, y sobre su corazón cayó la noche porque en ninguna parte encontró la tierra del Eldorado.
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Y al fin, cuando le faltaron las fuerzas, pudo hallar una sombra peregrina.—Sombra,— le preguntó — ¿donde podría estar esa tierra del Eldorado?
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—«Más allá de las montañas de la Luna, en el fondo del valle de las sombras; cabalgad, cabalgad sin descanso—respondió la sombra,—si buscais el Eldorado....».
1849
