Y era él quien arrancaba de mi pecho,
Él, la fascinación de mis sentidos;
Él, ideal de mis sueños más queridos;
Él, mi primero, mi ferviente amor.
Sin él, para mí, el campo placentero
En vez de flores me obsequiaba abrojos:
Sin él eran sombríos á mis ojos
Del sol los rayos en el mes de Abril.
Vivía de su vida apasionada;
Era el centro de mi alma el amor suyo;
Era mi aspiración, era mi orgullo.....
¿Por qué tan presto me olvidara el vil?
No es mío ya su amor, que á otra prefiere:
Sus caricias son frías como el hielo,
Es mentira su fé, finge desvelo;
Mas no me engañará con su ficción!...
¡Y amarle pude delirante, loca!
No, mi altivez no sufre su maltrato;
Y si á olvidar no alcanzas al ingrato
Te arrancaré del pecho, corazón!