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BOLETIN BIBLIOGRÁFICO

Manuale Isagogicum in Sacra Biblia, ex recentioribus ac proestantissimis operibus collegit, hodierno scientice statui accommadare tentavit, et sacrarum literarum studioso juventutis offert Franc. X. Caminero Muñoz; proesbit: palentinus ac doctor theologus. — Luci Augusti, 1868. — Sumptibus et typís Emm. Soto Freire. — Un tomo de VIII. — 766 páginas en 4.º

Como de esta obra, por más de un concepto notable, habrá de darse detallada noticia en uno de los artículos que pensamos publicar en nuestra Revista, nos limitaremos aquí á ligeras indicaciones acerca de su mérito é importancia. Su aparición es lo que suele llamarse un acontecimiento, ya se atienda al largo espacio de tiempo (más de un siglo) trascurrido sin que saliera á luz en España ningún otro libro del mismo género, ya á la vastísima instrucción que revela en el autor y le coloca en el número de los hombres más eminentes de nuestra patria. Lenguas vivas y muertas, clásicas y orientales, geología, arqueología histórica y prehistórica, etnografía, estética; en una palabra, cuantos conocimientos son precisos para cultivar dignamente los estudios bíblicos y ponerlos á la altura en que los tienen Francia y Alemania; todo eso demuestra poseer el Sr. Caminero, y poseerlo profundamente, según la soltura, aplomo y seguridad con que camina por el inmenso campo que en su magnífica obra recorre. Increíble parece que con la mezquina enseñanza teológica de nuestras Universidades y Seminarios, haya podido formarse un escriturario tan consumado, á quien por sólo esta su primera producción deberá de hoy más la patria de Arias Montano, y de tantos otros insignes bíblicos, verse redimida de la vergonzosa nota que le acarreaba hasta aquí el hecho de que en sus escuelas se estudiara la Sagrada Escritura por autores extranjeros ya olvidados en sus respectivas naciones. El Sr. Caminero hace adelantar un siglo á los estudios bíblicos españoles. ¡Lástima que haya escrito en una lengua, viva tan sólo para el clero, y no muy estudiada hoy, cuando las cuestiones que ventila son de interés general, pues se relacionan con las más trascendentales teorías históricas, geológicas, filológicas y fisiológicas de la ciencia contemporánea, y de su solución pende el porvenir del mundo! ¡Lástima que no ponga su obra en castellano, á fin de que puedan disfrutarla tantas, y tantas personas ilustradas como conocemos, poco afectas á leer libros escritos en el idioma del Lacio, y que sin embargo, gustan de las especulaciones bíblicas, que tan fecundo impulso han recibido en nuestro siglo, de la crítica y exegesis alemanas!