Página:Ramos de violetas.djvu/57

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página ha sido validada
55
RAMOS DE VIOLETAS

y cumple la misión de las mujeres
que es recordar el tiempo que ha pasado.»

Desde entonces desliza mi existencia
sumida en un dolor grande y profundo,
dudando de la Santa Providencia
al ver la ingratitud que hay en el mundo.

Dudando si es delirio, si es locura
vivir á los deberes consagrada;
si más allá la dicha se asegura,
ó después de luchar, sólo hay la nada.

Yo necesito amar, y amor me ofrecen,
mas no es el hombre cuyo nombre llevo:
delirantes quimeras me enloquecen
y quisiera querer, y no me atrevo.

Y en esta lucha horrible de mi vida,
Dios tuvo compasión de mis amores;
voy á morir, serena y convencida
que con la muerte acaban los dolores.

Voy á morir, guardad en vuestra mente
débil recuerdo de mi amor profundo;
y grabad en mi tumba, «Ya no siente
la mujer que á llorar vino á este mundo.»

Silvia murió; y su sepulcro helado
los sauces compasivos lo cubrieron,
y en mármol de Carrara fué guardado
aquel ser que en la tierra no quisieron.