tural de Madrid; Pedro Dorantes, factor, natural de Bejar, y ante los otros capitanes y gente que en la prouincia residían, las quales fueron le3^das en su presencia y de los otros clérigos y soldados que en ella estauan, por virtud de las quales resci- bieron al gouernador y le dieron la obediencia como a tal capitán general de la prouincia en nombre de Su Magestad, y le fueron dadas y entre- gadas las varas de la justicia, las quales el gouer- nador dio y proueyo de nueuo en personas que en nombre de Su Magestad administrassen la execu- cion de la justicia ceuil y criminal en la dicha pro- uincia.
CAPITULO CATORZE
DE COMO LLEGARON A LA CIUDAD DE LA ASCENSIÓN
LOS ESPAÑOLES QUE QUEDARON MALOS EN EL RIO DEL
PEQUERI
Estando el gouernador en la ciudad de la As- censión (de la manera que he dicho) a cabo de treynta dias que ouo llegado a la ciudad vinieron xú puerto los christianos que auia embiado en las balsas, assi enfermos, como sanos, dende el rio del Paraná, que alli adolescieron y venian fatigados del camino, de los quales no falto sino solo vno que lo mato vn tiguere, y dellos supo el gouernador y fue certificado que los indios naturales del rio auian hecho gran junta y llamamiento por toda la tierra y por el rio en canoas, y por la ribera del rio auian salido a ellos, yendo por el rio abajo en