en veynte y vii dias dende donde el gouernador los auia embiado hasta llegar al puerto de los Re- yes, lo anduuieron en doze dias, que les páreselo ,que dende aquel puerto hasta donde estañan los dichos indios auia setenta leguas de camino, y que vna laguna que esta a veynte leguas deste puerto, que se passo el agua hasta la rodilla, venia enton- ces tan crescida y traya tanta agua que se auia estendido y alargado mas de vna legua por la tie- rra adentro, por donde ellos auian passado, y mas de dos langas de hondo, y que con muy gran tra- baxo y peligro lo auian passado con balsas, y que si se auian de entrar por la tierra era necessario que abaxasse el agua de la laguna, _v que los indios se llaman Tarapecocies, los quales tienen muchos bastimentos, y vio que crian patos y gallinas como las nuestras, en mucha cantidad. Esta relación dio Francisco de la Ribera y los españoles que con el fueron y vinieron y de la guia que con ellos fue, los quales dixeron lo mismo que auia declarado Francisco de Ribera, y porque en este puerto de los Reyes estañan algunos indios de la genera- ción de los Tarapecocies, donde llegó el Fran- cisco de Ribera, los quales vinieron con García, lengua, quando fue por las poblaciones de la tie- rra y boluio desbaratado por h)S indios Guaraníes en el rio del Paraguay, y se escaparon estos con Iqs indios Chaneses que huyeron y viuian todos juntos en el puerto de los Reyes, y para informar- se dellos los mando llamar el gouernador, y luego conoscieron y se alegraron con vnas flechas que Francisco de Ribera traya de las que le tiraron
