mante. —A S. E. el ▼Presidente de la Cámara de Senadores.
Núm. 463
▼El ciudadano Nicolás Gana, hijo lejítimo del finado Márcos Gana, con el mayor respeto, hago presente a V. E. que, habiendo quedado vacante la portería de vuestra Sala por fallecimiento de mi citado padre, me es de necesidad hacer presente a V. E. el merecimiento que he tenido de prestar mis servicios así en la Cámara de V. E. como en la de los señores Diputados, unas veces supliendo a mi padre, como acompañándole el año 28 con el Soberano Congreso a Valparaiso todo el tiempo que residió allí; i a su regreso tuve merecimiento en premio de mis servicios que se me colocase (en la separación de las Salas), en la portería de los señores Diputados; este destino lo serví con la mas exacta actitud hasta el 1.º de Febrero de 1829, que cerró la Sala sus sesiones. En el tiempo que estuvo la Sala cerrada, se me ocupó en la creación del Batallón Cívico número 3, por cuya ocupacion, cuando se instaló nuevamente el Congreso, dió ocasion a que se colocase otro en mi lugar.
Hago presente a V. E. estos cortos merecimientos como igualmente los de mi finado padre; i suplico a V. E. se sirva tenerme presente al tiempo de proveer la portería vacante, para de este modo auxiliar la familia de mi finado padre como también la mia que se halla mas indijente. i Por tanto, a V. E. suplico se sirva proveer como solicito.
Es gracia. —Nicolás Gana.
Núm. 464
Soberano Señor:
▼El ciudadano don Lorenzo Carvacho, ante Vuestra Soberanía respetuosamente espongo: que es en mi noticia haber vacado la plaza de portero del ▼Senado; i considerándome en aptitud de poder desempeñar cumplidamente este destino, solicito de Vuestra Soberanía se digne concedérmelo mediante la garantía anticipada que ofrezco, en la série de servicios que he prestado a la Patria desde el año doce, en que fui prisionero de guerra en clase de sarjento distinguido de asamblea.
Señaladamente consagré mis servicios en el restablecimiento de la actual Administración, como es notorio, arrastrando serios compromisos, que un éxito adverso había labrado precisamente mi completa ruina, amagándome los facciosos con la confinación en Juan Fernández.
Estos ruegos, por mi constante adhesión al réjimen actual, son un título de opcion con mi presente solicitud, en cuya conformidad debo esperar que Vuestra Soberanía accederá haciendo en ello una gracia de justicia.
A este fin, suplico a Vuestra Soberanía se digne acceder de conformidad, que es gracia. —Lorenzo Carvacho.