Núm. 478
▼Conciudadanos del Senado i de la Cámara de Diputados:
Al reunirme de nuevo a vosotros, tengo la satisfacción de felicitaros por el goce no interrumpido de la paz doméstica, con que la Divina Providencia se ha dignado recompensar vuestros cuidados i los del Gobierno.
En medio de las ajitaciones que desgraciadamente han ocurrido en algunas de las Repúblicas hermanas, os complaceréis en observar que la cordial unión de todas ellas i su adhesión a la causa sagrada de la Independencia i a las instituciones liberales que unánimemente han adoptado, permanecen inalterables i se fortifican mas cada dia.
Nada ha turbado tampoco las amistosas relaciones que cultivamos con las otras potencias americanas, con las europeas que participan directamente de nuestro comercio, i con el resto del mundo civilizado, exceptuando la España. El ajuste definitivo de la cuestión pendiente con el Gobierno español es lo único que se echa de ménos en la perspectiva de paz universal, a que conspiran, sin duda, vuestros votos, i de que la guerra misma, para que pueda justificarse, no es mas que un medio necesario.
He recibido anuncios repetidos de la disposición en que se halla la España a tratar con los nuevos Estados americanos sobre bases justas i de recíproco beneficio; i despues de la notificación oficial que me ha hecho de ella el Gobierno de los Estados Unidos de América, que ha interpuesto espontáneamente sus buenos oficios para la apertura de esta importante negociación, creo que no existe motivo alguno que la embarace por nuestra parte. Os he dado comunicación de las bases que me pareció necesario fijar ántes de proceder a entablarla; las Repúblicas aliadas, cuya opinion ha podido saberse hasta ahora, han accedido a ellas unánimemente; i solo me falta vuestro sufrajio para acordar medidas ulteriores.
A la pintura que os hice el año pasado de la próspera marcha de la Nación, solo habría que añadir ahora nuevos motivos de congratulación i de felices esperanzas, si no tuviese que recordaros la calamidad espantosa que en el mes de Febrero último cubrió de ruinas tres provincias florecientes i llenó de dolor i consternación a toda la República. El ▼Ministro del Interior os dará noticias de las providencias tomadas por el Gobierno para reanimar a los desgraciados pueblos que han sido víctimas de este azote funesto, prestarles los mas necesarios socorros i contener la dispersión, que hubiera agravado i hecho irreparable por mucho tiempo el infortunio.
Lamentando conmigo la imposibilidad de proporcionarles auxilios adecuados, no dudo que en cuanto penda de vosotros propendereis a aliviar su suerte i fomentareis la restauración de las ciudades arruinadas, sea sobre los antiguos cimientos o en los nuevos sitios que los vecinos mismos elijieren; pues, en este punto no creo que deban contrariarse sus votos.
En las otras partes del territorio chileno adelanta rápidamente la civilización i prosperan todos los ramos de la riqueza pública.
Comparando los estados del año anterior i del actual, vereis un aumento notable en el número de alumnos que frecuentan las ▼escuelas de primeras letras i los establecimientos de enseñanza superior en el departamento de Santiago.
Mediante el nuevo recurso que el impuesto sobre el consumo de carnes ha procurado a los pueblos, se han fundado recientemente en algunos de ellos escuelas primarias i no tardarán en seguir su ejemplo otros muchos. Se han creado i están en ejercicio casi todas las clases que prescribe el plan de estudios del Instituto Nacional; i una juventud brillante cultiva con ardor la variedad de ramos que se enseñan en esta Casa Central de educación.
A las clases de la Facultad de Medicina acaba de añadirse una escuela de obstetricia dirijida por un hábil profesor.
Se ha hecho accesible al público la Biblioteca Nacional de Santiago.
Se han dado reglamentos al Instituto de Coquimbo; se ha creado en él una nueva clase de matemáticas, i el Gobierno se promete aumentar su importancia i ponerlo en relación con los ricos productos peculiares de aquella provincia, agregando una clase de química i mineralojía bajo la dirección de un profesor que se espera de Europa.
El que está encargado del viaje científico esplora actualmente las interesantes rejiones del Sur; un mapa exacto del territorio de la República debe ser uno de los principales objetos de sus recomendables trabajos.
I a fin de dar toda la consideración i fomento posibles al cultivo de la literatura i de las ciencias, os pasaré en breve un proyecto de lei para la reforma de la Universidad antigua sobre bases mas análogas a nuestras instituciones republicanas i de mas estensa utilidad.
He visitado los hospitales, el panteón, el hospicio i la casa de expósitos de la capital. El órden, aseo i economía que reinan en ellos han dejado atras mis esperanzas i no son ménos satisfactorios los informes que tengo del hospital de Valparaiso. El celo patriótico de los ciudadanos que tan desinteresadamente han tomado a su cargo la dirección de estos benéficos establecimientos, es superior a toda alabanza.
El Ministro del Interior os suministrará datos auténticos de la acelerada disminución en el número de delitos atroces que pocos años ha se cometían en esta ciudad i sus cercanías; disminución que no podréis ménos de mirar como una