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Página:Sevigne Cartas Escogidas.djvu/45

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CARTAS ESCOGIDAS 21

messon. — ¡Ah! esto no puede ser, replicó Pussort. — Yo no he encontrado nada en el proceso, añadió d'Ormesson. Enton- ces Pussort dijo con violencia : « ¡Ah, señor! Debisteis decirio más pronto; esto es una grave falta. » Mr. d'Ormesson no ha respondido nada; pero si Pussort le hubiese dicho todavía al- guna palabra, le bubiese contestado : « Señor, yo soy juez y no denunciador.¿ No recordáis lo que os contaba una vez en Fresne? » He aquí lo que es : Mr. d'Ormesson no ha descu- hierto esto más que cuando no ha tenido remedio. El Can- ciller ha interrumpido varias veces á Mr. d'Ormesson; le ha di- cho que á él no le precisaba hablar del proyecto, y esto es por malicia, pues varios juzgarán que es un gran crimen, y el Canciller quisiera que Mr, d'Ormesson no hiciese ver las prue- bas que son ridículas, á fin de no debilitar lá idea que de esto se han [ormado. .

Pero Mr. d'Ormesson hablará de ellas, puesto que es uno de los articulos que componen el proceso. Acabará mañana. Sainte-Helene hablará el sábado. El lunes darán su dictamen los dos relatores, y el maries se reunirán todos desde por la mañana y no se separarán hasla haber dado sentencia. Estoy transida cuando pienso en este día. Sin embargo, la familia tiene grandes esperanzas; Foucault (1) va solicitando por lodas par- tes, y hace ver un escrito del Rey en el que se le hace decir que encontrará muy mal que hubiese jueces que apoyasen su aviso sobre la sustracción de papeles; que es él quien los ha he cho tomar y que no hay ninguno que sirva para la defensa del acusado; que son papeles relativos á su estado, y que él lo de- clara á fin de que no se piense en juzgarle por esto. ¿Qué os parece de este hermoso proceder? ¿No encontráis desesperante el que se presenten asilas cosas á un Rey que amaría la juslicia y la verdad si las conociese? Él decía el otro día al levantarse que Fouquet era un hombre peligroso. Ved aquí lo que se le ha puesto en la cabeza,


(1) El escribano de la Cámara del Arsenal que leyó 4 Fouquet su sontencia.