de ministriles, y todo ornato y aderezo, en que se celebran los divinos oficios, con toda gravedad y solemnidad; tiene por sufragáneos los tres obispos que hay, en las islas de Sebú, Cagayan y Camarines.
Hay caja real, con tres oficiales reales, factor contador y tesorero, por cuya mano se administra la hacienda real, de todas las islas[1].
Desde esta ciudad de Manila se despachan los navíos, que cada año hacen viaje á la Nueva España, con las mercaderías, y empleos de todas las islas, y á ella vuelven de la Nueva España, con lo procedido destas mercaderías, y socorros ordinarios.
En ella reside de asiento el campo de la soldadesca de paga, que su Magestad mandó hubiese en las islas.
En Manila asimismo residen algunas galeras, con su general y capitanes, y otros navíos de alto borde de armada, y otros menores á la usanza de la tierra, para acudir á las necesidades de todas las islas.
Á la bahía y rio de Manila acude todo el golpe de navíos de China, Japon, Maluco, Borney, Sian, Malaca y la India, que vienen á las Filipinas, con sus mercaderías y contrataciones, y aquí las venden y rescatan, para todas las islas y poblazones dellas[2].
En la provincia de la misma isla de Luzon, se fundó la ciudad de Segovia[3] en tiempo de don Gonzalo Ronquillo, tercero gobernador; es de docientos vecinos Españoles, poblados en casas de madera, á la ribera del río Tajo, dos leguas de la mar y puerto de Camalayuga; tiene un fuerte de piedra junto á la ciudad, para defensa della y del río, con alguna artillería, y su
- ↑ Esto está tan cambiado ahora y los empleados han aumentado tanto, que los gastos ascienden cada año á más de 2,000,000 $ siendo el sueldo del Intendente 12,000 $.
- ↑ Exceptuando el comercio con la China, el trato con las otras naciones había cesado durante más de dos siglos.
- ↑ Esta ciudad ha desaparecido del mapa y del terreno, quedando en su sitio Lal-ló, población poco importante; se le sigue nombrando, sin embargo, por el obispado de Bigan, actual residencia del obispo.