Ir al contenido

Página:Viaje al Interior de Tierra del Fuego (1906).pdf/15

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página no ha sido corregida
— 16 —

― Después de una larga navegación en que se sufrieron sérios contratiempos, Gardiner y sus compañeros desembarcaron dos meses más tarde en Banner Cove, puerto de la isla Picton.

La Ocean Queen les dejó provisiones para seis meses, dos balleneras y dos botes pequeños para su movilidad, armas y municiones, etc., etc.

Los intrépidos misioneros quedaron solos en aquel país desconocido y entonces inhospitalario, pero llenos de la noble resolución de llevar á cabo la tarea emprendida.

La Isla Picton, que se encuentra en el extremo Este del Beagle, entre Haberton y Sloggett, no ofrecía recursos para la subsistencia. Los yaganes, por otra parte, hostilizaban á los misioneros que habían ido á establecerse en su territorio. Las provisiones comenzaban á escasear, las esperanzas de recibir ayuda de Inglaterra se hacían más problemáticas, y la situación iba presentándose insostenible.

En este trance, Allan Gardiner resolvió abandonar la isla, para ir á establecerse con sus compañeros en lugares más hospitalarios.

Tomó sus barquichuelos, embarcó en ellos los pocos víveres que le quedaban y pocos meses después de su arribo á Banner Cove, salía de allí para ir á buscar la muerte en Bahía Aguirre.

Dirigióse Allan Gardiner, en efecto, á dicha bahía, que se halla a unas treinta millas al Este de Picton, en la angosta punta que Tierra del Fuego avanza sobre el Atlántico. Desembarcó allí, en un sitio que le pareció conveniente, pero luego resolvió dirigirse al Puerto de los Españoles, situado en la misma bahía.

Por si llegaba algún buque de Inglaterra en socorro y llevándole provisiones desgraciadamente se habían agotado ya cuantas tenian,dejó sobre una piedra la siguiente inscripción: Dig below Go to Spaniard's Harbour.—March 1851.

Cave al pié. Vaya al Puerto de los Españoles. Marzo de 1851. » Al pié de la piedra enterró con las precauciones del caso, para que se conservara, un papel que contenía este angustioso llamado: «Si Vd. marcha por la playa, milla y media, nos encontrará en el otro bote amarrado en la boca de: río, en el extremo de la bahia, lado Sud. No tarde, porque nos estamos muriendo de hambre.» Desgraciadamente este pedido desgarrador de auxilio iba á conocerse demasiado tarde.

La muerte más horrible aguardaba á los infortunados y valerosos misioneros......

El buque «Dido», de la escuadra inglesa, que iba á llevarles provisi nes, llegó al escenario de aquel drama el ó de Euero de 1852, muchos meses después de la catástrofe......

Guiados por la inscripción y por el rumbo que señalaba el papel enterrado, los tripulantes de la «Dido» fueron en busca de los cadáveres, pues no otra cosa esperaban encontrar.

Lo primero que encontraron en el Puerto de los Españoles fué los