Parnaso español 022
Apariencia
Amagos generosos de la guerra
en esa mano diestra esclarecidos
militan, y estremecen referidos,
y el ademán ejércitos encierra.
El pino, que fue greña de la sierra
y copete de cerros atrevidos,
fulminando con hierros sacudidos,
rígida era amenaza de la tierra.
La caña descansó el temor al día
en que tu lanza aseguró campañas
que ardor disimulado prometía;
figurando, en la entrada de estas cañas,
cortés y religiosa profecía,
la de Jerusalén a tus hazañas.