Parnaso español 196
Apariencia
¡Mucho del valeroso y esforzado,
y viéneslo a mostrar en un rendido!
Bástame, Amor, haberte agradecido
penas, de que me puedo haber quejado.
¿Qué sangre de mis venas no te he dado?
¿Qué flecha de tu aljaba no he sentido?
Mira que la paciencia del sufrido
suele vencer las armas del airado.
Con otro de tu igual quisiera verte;
que yo me siento arder de tal manera,
que mayor fuera el mal de hacerme fuerte.
¿De qué sirve encender al que es hoguera,
si no es que quieres dar muerte a la Muerte,
introduciendo en mí que el muerto muera?