Poned la limpia mesa a Cristo, y coma
Apariencia
- A un hueso de San Lorenzo
- Soneto LXI
Poned la limpia mesa a Cristo, y coma, espíritus divinos, del cordero, de cuyo sacrificio verdadero el humo sube en oloroso aroma. Color de rosa en las parrillas toma; sazón le ha dado amor, servidle entero; vuele a mejor Arabia y hemisfero deste fénix la cándida paloma. Está sin corazón, asóse presto, y que le vuelvan de otro lado avisa, para llevar mejor el fuego impreso. Ángeles, si la mesa se habéis puesto, decidle que la carne coma aprisa, que el más cristiano Rey espera un hueso.