Por una negra señora
Por una negra señora
un negro galán doliente
negras lágrimas derrama
de un negro pecho que tiene.
Hablóla un negra noche,
y tan negra que parece
que de su negra pasión
el negro luto le viene.
Lleva una negra guitarra,
negras las cuerdas que tiene,
negras también las clavijas,
pues negro es el que las tuerce.
--"Negras pascuas me dé Dios,
si más megros no me tienen
los negros amores tuyos
que el negro color de allende.
Un negro favor te pido,
si negros favores vendes,
y sí con negros favores
un negro pagarse debe."
La negra señora entonces,
entafada del negrete,
con estas negras razones
al galán negro entristece:
--"Vaya muy en hora negra
el negro que tal pretende,
que para galanes negros
se hicieron negros desdenes."
El negro señor entonces,
no queriendo ennegrecerse
más de lo negro, quitóse
el negro sombrero y fuese.