Consejos para las novias
Una novia debe ir triste y turbada,
Derrengándose al modo de cansada,
Llevar la vista gorda, y de este modo,
Como que nada vé, mirarlo todo.
En cada pié, moviendo una muralla,
Que parezca que van á ajusticialla.
Si le dijesen algo, el abanico
Es respuestr., tapándose el hocico;
No escupir; si hay saliba adentro, chupa,
Que no hay doncella que la boda escupa,
Tierna de ojos como herbor de olla,
Y si no hay llanto darse con cebolla;
Y en viendo al cura, reclinando el moño,
Quedar mas colorada que un madroño;
Y ostentando decoro para el necio,
Fingir suspiro y resollar muy recio;
Y perqué el auditorio mas se aturda,
Trocar las manos y alargar la zurda.
Decir el sí quedito y entredientes,
Que apenas lo perciban los oyentes,
Porque si luego el novio no le agrada
Puede decir después que fue forzada.
Y con esto, y volver suspensa y muda,
Aunque esté mas alegre que viuda,
Cumple todas las leyes de la fiesta,
Y va el novio diciendo: ¡Qué modesta!!!
Pero sino le agrada su consorcio,
A dos meses le dá con el divorcio.