Descripción Geográfico-Moral de la Diócesis de Goathemala/Tomo 1/Texacuangos

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MAPA DEL CURATO DE TEXAQUANGOS.

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Parroquia de Santo Thomas Texaquangos.[editar]

Desde el Pueblo de San Jacinto al de Santo Thomas Texaquangos hay tres leguas, rumbo de poniente á oriente; la primera legua es de buen camino, y las dos restantes de cuestas no malas; vá el camino por entre dos cordilleras de montañas, y la valle que forman toda es campos de sembraduras de maizes, y caña; y aun las montañas, prinsipalmente la que se lleva á la vanda del Sur, tiene los mismos campos de sembradura hasta la misma cima; y assi en este territorio hay cosechas abundantes de maizes, frejoles, caña; y tambien se coge el trigo. Con todo, aunque segun esto devieran estar los Yndios abundantes, y acomodados; no por eso dejan de aparecer como todos, y como de los Pueblos en donde no hay tales cosechas, ni con abundancia.

La cavezera de esta Parroquia es el referido Pueblo de Santo Thomas Texaquangos, el qual se halla en malissima situacion porque todo el consiste en varias varrancas profundas, y en ello mismo de ellas están puestos los jacales (aunque tambien los hay en las profundidades) y con esto para andarse el Pueblo es por sendas no mui anchas, llevando á todos lados á dichas Varrancas. Hay muchissimos Trapiches en el Pueblo, y fuera de él; tiene dos anexos 1º el Pueblo de Santiago á una legua de distancia, y en el mismo camino que se trahe desde San Jacinto; es buen Pueblo con Yglecia nueba, y bien adornada. 2º el Pueblo de San Marcos á distancia de dos leguas en la situacion, que aparece en el mapa, y en las dichas distancias, que se ponen en la tabla siguiente.

(1_ Pueblo de Santo Thomas Texaquangos cavez.a Leguas
(2_ Pueblo de Santiago a 1
(3_ Pueblo de San Marcos a 2

Hay tambien en el recinto de esta Parroquia dos haziendas pertenecientes á las Cofradias, de las que no se hace particular memoria, por haver dicho el cura; que ninguno havita en ellas; aunque se esto inverisimil por mui cercanas que estén á los Pueblos, se pasa por dicha relacion, por conciderar de poca entidad el asunto, pues quando mas vivirán en cada una de ellas tres, ó quatro Perzonas. No obstante, pues dice el cura; que están á las orillas de la mar, no dejaran de distar de los Pueblos como quatro leguas.

En el P.o de Sto Thomas hay familias 329 con  912 Personas
En el P.o de Santiago hay familias 365 con 1003 Personas
En el P.o de San Marcos hay familias 155 con  453 Personas
En los 3„ Pueblos hay Parbulos segun las respuestas del cura 1940
De que resulta haver en esta Parroquia fam.s 849 con 4308 Personas.s

Esta administracion se halla á cargo de un Cura, que los es há diez años Don Thomas Escudero Español natural de las montañas de Burgos, de edad como sesenta años, ecclesiastico habil, celoso, y de mucho juicio; se ayuda de un Coadjutor, que lo es Don Miguel Brioso; la gente anda en mucha desnudez; el Ydioma materno es el mexicano pipil, no necesario para la administracion, porque todos entienden, y hablan el Castellano.

Dice el cura en sus respuestas: razon de las cosas que necesitan pronto remedio por ser opuestas á los preceptos página Divinos, y eccleciasticos.

Primeramente hé observado en toda la mayor parte de este Arzobispado la poca devocion, y el tedio con que la mayor parte de Yndios oyen misa, y guardan los dias de fiesta; pues la pratica nos enceña que solo por medio de cuero bienen á la Yglecia los dias de fiesta; y los dias festivos van saliendo á las quatro de la mañana de su Pueblo á tratar á otros, ó se esconden en el monte, y plantanares hasta pasada la hora de misa &&.a.=itten los demandantes questuarios, y abominables, que se aparecen en los Pueblos... siendo los mas de ellos mulatos, negros, é Yndios de malas costumbres... usando de muchas artes, y tretas para demandar &&.a (hace narracion de algunas que llama artes, y tretas)=ittem. hé observado, que en toda la Provincia de San Salvador usan los Yndios de una abusion nosiva, y es que á los quatro dias de haver muerto algun Yndio ponen en la cama donde fallecio un cajete de agua, y una candela ardiendo; y diendo esto tarde de la noche, concurren á la casa de los dolientes los parientes del difunto, y volteados de espaldas á la Cama donde está la candela, esperan que venga el difunto á despedirse, y en efecto viene el diablo, y haciendo un gran ruido en el tabanco de la casa se despiden diciendo á Dios, á Dios, dale muchas memorias a fulano, y á fulana. Esta ceremonia la llaman en mexicano Nahuite, que quiere decir ultima despedida.=Ittem. hé observado, y prohivido; que en toda esta Provincia de San Salvador usan los Yndios con los difuntos para sepultarlos una ceremonia que arguye en ellos inmortalidad del cuerpo, y es; que al baron lo ponen en el mejor paño de manos, que tenia, en el pescuezo, devajo la mortaja con cautelosa malicia; y alas embras adultas, una servilleta amarrada en la barriga, como la usan para moler acá, para que assi muelan allá, y el pañuelo en los varones, especialmente en los prinsipales, que han governado acá, para que Galanos (en ellos es uno y el principal adorno) goviernen allá llevando la mejor ropa, que tenia debajo de la mortaja.

Procigue el cura en dhas respuestas manifestando abusos de los Yndios, que pueden verse á lo largo en su carta y refiré aqui en suma, y son; que en esta Provincia en las festividades de los Patronos usan de historias de moros, y Españoles con mucha irreverencia de los templos; y que haviendolo impedido en cierto curato vecino á este en una ocacion, que se hacia dicha fiesta; con la capa de costumbre queria cohonestarla el cura de dicha Parroquia.=Que apenas se hallará Pueblo de naturales (quiere decir Yndios) en que no halla idolatras, y maleficios amatorios, y hechizeros, y lo prueva en el Pueblo de San Marcos con un caso bien lastimoso, que puede verse en su carta, convencido por quanto Curas como Testigos de vista, sobre el que se siguio proceso, que despues se embrollo, y aun es de temer por uno de los mismos curas que lo vieron.= Que há notado con bastante especulacion página 51y por convenir en lo mismo los Padres del colegio de Cristo que salen á misionar; que en muchos Pueblos de visita, que assi se llaman los anexos á las cavezeras; que los Yndios sacristanes con los Ydolatras del Pueblo, sacan de noche los sagrados ornamentos, y ván á las cuevas, y quebradas, á celebrar sus ceremonias de Ydolatria, y buelven antes que amanesca con mucho disimulo á la sacristia los ornamentos, y que este es un daño, ó sin remedio, ó con remedio mui dificultoso; pues solo se halla el de poner un Sacerdote en cada Pueblo. Hasta qui el Cura en sus respuestas.

La renta del Curato, segun relacion del cura asciende á 1680 p.s Aunque nada dice de escuela de Niños no hay otra, que la del fiscal para enceñar la doctrina como en quasi todas las Parroquias en que dicen los curas que hay escuela; porque el fiscal enceña a los Niños y Niñas á cantar las oraciones, el Alabado, y el todo fiel Christiano, como diré abajo.

Reflexiones.

El cura que hallé en esta Parroquia á tiempo de la vicita era, havia diez años, Don Thomas Escudero como llevo dicho natural de los Reinos de España, y segun me acuerdo de las montañas de Burgos; fue coadjutor en varias Parroquias de este Arzobispado; estuvo algun tiempo en el oratorio de San Phelipe Neri de esta ciudad; y ultimamente vino á ser cura de esta Parroquia. Era hombre de cordura, y entereza, y proporcionado para tratar con los Yndios; por que tenia mucha paciencia, y tambien seriedad con que podia hacer mucho para apartarlos de sus abusos, y para que lo respetáran.

Con esta ceriedad, y entereza los convocó ante mi en el tiempo de la vicita que me expucieran con toda livertad quando huvieren notado, que desdixere del cumplimiento de su obligacion; de lo que nada resultó, y haviendo quedado justificado, me insinuó; que deseaba lo relevara del empleo de cura; y no hallando merito para ello, sino para conservarlo, me pidio un coadjutor, que pudiera servir algun tiempo de ynterino, y hacerse cargo de la Parroquia por no poder el yá mas por falta de salud. Condescendi; pero á pocos meses hizo mayor instancia para renunciarla, y regresarse á morir en España; y en vista de los motivos que exponia, se le admitio la renuncia en Tribunal, y haviendose embarcado se tuvo noticia de haver muerto.

En orden al tedio, que muestran los Yndios para oir misa se halla contestado por muchos curas en este escrito y lo cierto es que, pudieran contestando todos; pues para ninguna página cosa tienen los Yndios mayor repugnancia, que para asistir á misa, á la explicacion de la doctrina christiana, y para que se establescan escuelas.

Aunque dice algunos excesos de los demandantes pudo aumentar, que por las noches suelen hacer que se velen las Ymagenes, que llevan, y se reduce dho velorio al que se acostumbra generalmente con los Parbulos difuntos, de que se habla arriva tratando de la Parroquia de San Salvador; y que la limosna que se recoge se la quedan ó emplean alguna parte en semejantes excesos, quando llegan al Pueblo de donde es la Ymagen, como se dirá tratando de la Parroquia de Esquipulas.

Respecto á la ultima despedida á los quatro dias, que alguno há fallesido; sin embargo de decir, que es general en toda la Provincia; y lo mismo el abuso de ponerles á los barones el pañuelo, y á las mugeres la servilleta, para que gobiernen aquellos mas engalanados, y estas hagan tortillas en el otro mundo; si bien muchos curas me lo manifestaron particularmente en conversacion; pero pocos lo manifiestan en las respuestas. Para convencer lo que en este particular intenta el cura no hay mejor argumento, que lo sucedido en su mismo Pueblo una tarde que salimos á ver el terreno de la Parroquia, y para decirlo como sucedio, se pondrá como conversacion entre el cura significado con la letra C. y el fiscal notado con la letra F.

Salimos, pues, á pasear una tarde acompañados del Fiscal, Alcaldes, Principales, y de mucho Pueblo; el Fiscal aunque no estaba ebrio, pero si bien bebido, y alegre; como el Cura tenia natural seriedad fue cosa de admirar el modo con que se entró en la siguiente conversacion. C. Vamos fiscal quanto dinero has escondido en estos dias? F. Yo no hé escondido estos dias dinero. C. Vaya que si. F. Yo no hé escondido dinero en estos dias. C. Vaya que si. F. Yo digo que no. C. Vaya que si, pues Yo lo sé. F. Yo no escondo el dinero, por que soy pobre; quien lo esconde son los Alcaldes, prinsipales, y los que lo tienen, y, si Yo lo tuviera tambien lo escondiera. C. Vaya que si, por que estos dias has molido tanta azucar. F. Yo no lo escondo por que no lo tengo; los que lo esconden son los que tienen. C. Vaya que si. F. Yo no lo escondo; por que no lo tengo; he molido tanta azucar; pero dos pesos di para el Trivuto; tantos por una ropa que devia &&.a y assi no hé escondido nada; pero si lo tuviera tambien lo escondiera, por que si no, que hé de comer despues que muera? Aqui corté la conversacion manifestando; que despues de la muerte, ni se come, ni se bebe, ni sirve el dinero; y á esto replican, con que nosotros se lo enceñamos, diciendo que han de resucitar.

Sobre esto hay mucho, que decir, y es cosa lastimosa solo pensar, que se teme con fundamento el mucho dinero, que entierran los Yndios para siempre. En varios Pueblos, y en este mismo cogen mucho dinero de azucar; en otros de cacao; en otros de algodon; y en michos del Obispado de Oaxaca de la grana; con todo, y qu e es poco el dinero, que gastan; tampoco se vé que lo tengan, ni lo empleen, con que es de temer que lo sepultan.

Dice que apenas se hallará Pueblo de Naturales página 52sin Ydolatrias, maleficios, y hechiseras. Esta es fama mui corriente en esta, y algunas otras Provincias; pero no hay medio para que se internen en esto los curas, y tengo por cierto el motivo, que expuse, tratando de la Parroquia de Caluco, que es el medio. Es tambien de admirar; el que siendo testigos quatro sacerdotes de lo sucedido en el Pueblo de San Marcos; y testigos, que evidencian el caso, nada se haya convencido, aún haviendose formado proceso que sucederá con los procesos en que ni hay semejantes testigos, ni tales convencimietnos? Lo que sucede es; tener el dolor de verlos llenos de mentiras, y perjuicios, con que todas las cosas quedan impunes, y sin remedio aún los delitos mas notarios y escandalosos.

En orden á lo que dice; que sacan de la Yglecia los ornamentos, y vasos sagrados para hacerlos servir á la Ydolatria; se ha dado edicto general, para que el cura, y ministros los tengan cerrados; pero es remedio debil lo 1.º por que sin embargo de esta providencia, y otras temo; que tienen mui poca observancia; pues en el mismo asunto la hé visto inobservada por mis propios ojos quando la estaba mandando con todo empleño; lo 2.º por que aún quando el cura recoja las llaves ellos tienen modo para abrir las Yglecias, y hacer de noche en ellas lo que se les antoja, como se dirá trata ndo de la Parroquia de Mazathenango.

En esta concideracion, aunque algunos se persuaden hallarse bien fundada la Religion Xptiana en los Yndios por lo que gastan en Templos, y ornamentos; este es un argumento muy equivoco; supuesto, que se sirven de los mismos para su Ydolatria; y esto ppodria corroborarse en esta Parroquia, porque en el Pueblo anexo de San Marcos tienen una Yglecia hermosa, y no cesan de adornarla, sin que dexe de hacer novedad lo que sucede con no querer cura ni ministro, que este muchos dias en el Pueblo, es el caso; que en este Pueblo recide el Cura como ocho, ú diez dias al mes; pero el dia antes que se concluyen, yá van los Yndios á preguntarle: quando te vás Padre? y no lo dejan reposar, hasta que marcha; y aunque algunos quieren escusar estas instancias de los Yndios con pretextos frivolso; el motivo verdadero, que se debe temer es que les hace algun embarazo para sus Ydolatrias, y caprichos, ó para vivir á su antojo de qualquier modo; esto es lo que se debe discurrir, y temer; porque para que tanto adorno, y gasto en la Yglecia, no queriendo Cura ni ministro? Lo mimso discurro de las halajas de plata, y ornamentos; las tienen es verdad, pero para servirse de ellas para sus Ydolatrais, y de esto hay varias congeturas; hacen frontales, doceles y sagrarios de plata, pero repugnan el que se tenga depocito con el pretexto de que no quieren gastar, ni tienen para la lampara, ni quieren que se concerve sin ella; y lo que unicamente quieren es que página no lo haya; y muchas lamparas podrian mantenerse con lo que, hastan en plumas, y en otras cosas impertinentes.

He dicho alguna otra vez; que son tan astutos en el particular de ocultar su Ydolatria, que no hay arte, que no inventen para ello hasta poner los Ydolos escondidos en las Ymagenes; por otra parte tienen tanto miedo los pobres Curas, de que si se empeñan en descubrirlos, les quitarán la vida; que ciertamente es una gran compacion. En este conocimietno, y que en los Pueblso anexos donde no hay cura, ni ministro profanan á salbo conducto todo lo Sagrado, hé dicho á varios Curas; que se animáran á ir de noche á los Pueblos anexos, sin que tuvieran noticia, y oberváran lo que hacian los Yndios; pero todos ponen mil embarazos; todos lo tienen por imposible, y puede consistir en el mucho miedo, que en este particular tienen á los Yndios; aunque no se me oculta pueden ocurrir algunas dificultades. Me há ocurrido valerme de Personas seglares, pero por varios motivos entiendo, que seria en vano; pues no es regular, que las Ydolatrias; que exerciten en su caso no serán todos los dias, sino en los que digan sus computadores; de quienes se tratará particularmente en la Parroquia de Zamayac, y entonces usarán de tales astucias, que nada se averiguaria.

En esta Parroquia me asegure de lo que son las escuelas, que se dicen de doctrina encomendadas al Fiscal, y despues he observado lo mismo en muchissimas otras por no decir en todas. Se reduce dha escuela, á que el fiscal les canta algunas oraciones, y las Niñas y Niños responden tambien, cantando lo mismo, que dice el fiscal; unos las retienen de memoria, aunque tropezando en varias palabras; otros ni aún llegan a poderlas decir, ni aprender de memoria aun que mal; pero á lo que ninguno llega es á entender palabra, ni cosa alguna, ni puede ser; por que en vez de la pia afeccion, que para esto se necesita, tienen una pocitiva repugnancia. En este conocimiento, y aún escogiendo aquellos en que ponen los Curas el mayor cuidado (del modo que aqui se pone) hé preguntado á algunos: etienden estos Yndios lo que dicen? Y sin duda alguna me responden que no, assi me sucedió en Ysapam, y en San Lucas Zacatepeques, y assi responderan en todas partes que se pregunte, sin que haya Cura, que acegure hay uno siquiera que entienda misterio alguno, ni verdad de nra Sta religion; y que lo mas que se concigue es, que pocos sepan decir mal algunas oraciones; Yo he preguntado á varios, aunq.e ninguno me ha respondido, ni aun diciendolas de memoria, dicen los curas que es por encogimiento; pero no lo creo, pues son habladores sin termino en otros asuntos.

Por haver renunciado este curato D.n Thomas Escudero puse por interino á D.n Manuel Perez ecclesiastico modesto, y habil. En su interinato sucedió (me parece fue dos vezes) que haviendo llamado para administrar á una enferma el Santo oleo; se puso á exhortarla, á que se confesara. Dijó la enferma; que yá se havia confesado, y creyendo que fuera delirio lo preguntó á los asistentes, y le dijeron que si; pero como el cura instala á que no podia ser, preguntó con quien? y se le respondio que con Don Joseph Buenvecino, cuando era Coadjutor de la Parroquia lo qual averiguado, se halló, que havia diez años, que estaba fuera de la Coadjutoria, y otros stantos quando menos que se havia confesado. Este es el concepto que se hace de los sacramentos sovre lo que vease cosa algo semejante en la Parroquia de Opico.