Doble error/XVI
Apariencia
XVI
Chaverny llegó tres días después de su entierro. Su dolor pareció sincero, y todos los habitantes de la aldea lloraron al verle de pie en el cementerio contemplando la tierra recién removida que cubría el féretro de su mujer. Primero quiso exhumar el cadáver para llevárselo a París; pero como el alcalde se oponía y el notario le hablaba de formalidades interminables, se contentó con encargar un bloque de piedra caliza y dar órdenes para la erección de una tumba sencilla, pero decorosa.
Châteaufort sintió vivamente esta muerte tan repentina. Declinó varias invitaciones a bailes, y durante algún tiempo no se le vió más que vestido de negro.