Esta enfermo y quiere verte
¿No me respondes? ¿Te han dicho
a lo que vengo? No es hora
de negarte: ese capricho
sería cruel ahora.
Quiere que vayas a verle...
Quedó en un grito, entretanto.
¡Vieses! Debemos tenerle
compasión: padece tanto!
¡Y vuelta a la misma queja!
Ya ni un momento se calma,
¡si vieses cómo se queja
se te partiría el alma!
Se le conoce en la cara
el sufrimiento. Al hablar
vuelve la cabeza para
que no le vean llorar.
¡Si no regreso contigo
le he de causar una pena!
Después de todo es mi amigo...
Vamos, por favor, ¡sé buena!
Aunque siempre fué un ingrato
tú no eres rencorosa,
¡vamos! estarás un rato
y le dirás cualquier cosa!
Vamos, antes que se muera;
así le perdonarás...
¡Vamos! el pobre te espera:
¡vendrás a verlo! ¿vendrás!