Herminia
Apariencia
Quiero yo tener ya las noticias
del amor que tú me has de profesar
y de ti recibir las caricias,
si es que tú
me amas con fidelidad.
Quiero, pues, de una vez saber
para ya no tener esta pasión
que por esta ingrata mujer
sufre y llora mi corazón.
Pero vente,
Herminia de mi alma,
te lo ruego por Dios,
a gozar de una vez
sin temor ni piedad,
qué juntitos ya los dos
tú verás la realidad.
Ven ya, Herminia del alma,
yo no puedo vivir lejos de ti;
yo me aloco y pido la calma,
yo te amo y te adoro
con ardiente frenesí.
Dime, pues, si es un delito
que te pida un recuerdo de mi amor;
hoy mi alma verás solita
como una prueba
más de mi verdadero amor.