en la formacion jurásica, que es donde llega al máximun. En la época de esta formacion vivian plesiosauros de largo cuello de cisne formado de treinta vértebras; el megalosauro, cocodrilo gigantesco de 15 metros de largo, con los huesos de sus piés muy semejantes á los de nuestros mas pesados mamíferos terrestres; ocho especies de ictiosauros; el giosauro (Lacerta gigantea de Sœmmering); y en fin, siete especies de repugnantes plerodáctilos ó saurianos provistos de alas membranosas (5). El número de saurianos semejantes á los cocodrilos, disminuye ya en la creta; encuéntrase sin embargo, en esta formacion, el cocodrilo de Maestricht (el mososauro de Conybeare), y el colosal iguanodonte;, que quizás era herbívoro. Segun Cuvier, los animales pertenecientes á la especie actual de los cocodrilos se remontan casi á la formacion terciaria; y aun el hombre testigo del diluvio de Schenzer (homo diluvii testes), enorme salamandra del género del axolote que traje á Europa de los grandes lagos del rededor de Méjico, pertenece á las mas recientes formaciones de agua dulce de Œninga.
Tratando de leer en el órden de superposicion de los terrenos la edad relativa de los fósiles que contienen, se han descubierto importantes relaciones entre las familias y las especies (estas últimas siempre poco numerosas) que han desaparecido, y las familias ó las especies vivas todavía. Todas las observaciones están contestes en que los faunos y las floras fósiles difieren tanto mas de las formas animales ó vejetales existentes, cuanto que las formaciones sedimentarias donde yacen, son mas inferiores, es decir, mas antiguas. Así, pues, grandes variaciones han tenido lugar sucesivamente en los tipos generales de la vida orgánica: grandiosos fenómenos, señalados primero por Cuvier (6), que ofrecen relaciones numéricas, que han sido objeto de las investigaciones de Deshayes y Lyell, y han llevado á estos sabios á resultados decisivos, sobre todo en cuanto á