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y mesurada razon quelos predisponia poco álas ¡impresiones de los sentidos, llevándoles mas bien hácia las realidades de cada dia, que no hácia la contemplacion poética é ideal de la Naturaleza. Estas oposiciones entre la vida interior de-los Romanos y la delas tribus griegas se reflejan en la literatura, espresion inteligente y fiel del carácter de los pueblos. A pesar de su comunidad de orígen, la estructura interna de ambos idiomas formaba una nueva diferencia entre ellos. Convíenese en reconocer que la lengua del antiguo Lacio es menos rica en ¡mágenes, menos variada en sus glros, y mas propia para espresar la verdad de las cosas que para plegarse á las fantasías de la imaginacion. Además, la imitacion delos modelos griegos enel siglo de Augusto, contribuyó á desnaturalizar los ingenios, dificultando sus libres espansiones. Algunos genios superiores, sostenidos en su amor por la patria, supieron, no obstante, romper talestrabas, merced á una fecunda originalidad y ála elevacion de las ideas traducidas en un lenguaje admirable.
La poesía desplegó todas sus riquezas en el poema de Lucrecio sobre la Naturaleza. El autor, discípulo de Empédocles y de Parmenides, abraza en su obra elmundo entero realzando aun mas la magestad desu esposicion por las formas arcaicas de su estilo. La poesía y la filosofía han confundido sus fuerzas en el libro de Lucrecio, sin que resulte nunca de su mezcla aquella frialdad que censuraba ya severamente el retórico Menandre, comparándola al brillante aspecto bajcelcual se representaba Piaton la Naturaleza (22). Mi hermano ha analizado con gran sagacidad los efectos análogos ó desemejantes producidos por la union de la poesía y de las abstraciones filosóficas en los antiguos poemas didácticos de la Grecia, en el poema de Lucrecio y en el episodio del Bagavad-Gita (23). Al considerar el gran cuadro dela Naturaleza trazado por el poeta romano, sorprende el contraste que constituyen la aridezdel sistema atomístico y