MARÍA DE VILLARINO 487
CANSANCIO
La noche ha salpicado de estrellas
mi cansancio.
El huerto en sombra
me retiene, casi dormida, en sus brazos y me acuna un silencio
amplio
como la voz del mundo
y el latir de los astros.
Así será la muerte.
Sombra en la sombra.
De frente a los recuerdos
con el cansancio grande de la espera. En silencio.
Indefinida ruta a todos los senderos. Sin mañana.
Sin presente.
Aquietamiento estéril
ante el rodar del mundo,
enclavada en la cruz del olvido y sin norma del tiempo.
PANTEISMO
Me ha despertado alegre la mañana de Ramos. ¡Premura de campanas!
Hoy es día de misa,
Me arroba un sueño mistico de piedad infinita, en mis labios renace la plegaria olvidada,
y bajo la serena quietud de la mañana,
voy vestida de blanco a la capilla aldeana. Llevo un ramo de dalias y en la limpia mirada