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Página:Arte de las putas (1898).djvu/95

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ARTE DE LAS PUTAS

los platos exquisitos de viandas.
¿Quién discurriera que el putero debe
distinguir las naciones y sus genios
como el gran general que guerras mueve?
Pues esta industria enseñará mi verso.
Las mujeres de todo el Universo
son siempre á mi apetito lisonjeras,
pero aun los extranjeros anteponen
las españolas á las extranjeras.
Una de éstas estaba (y yo no quiero
decir de qué nación, porque no pierdan
las naciones por mí) digo que estaba
con un amigo haciendo aquel negocio
más digno de atención que hay en el mundo,
y al tiempo que él con miembro furibundo
las puntas de los piés y las rodillas
apretaba, y empeine, y jadeante
las uñas la clavaba en las costillas,
la sosa malditísima, tirando
estaba al techo huesos de cereza
sin sentir las cosquillas de la pieza.
Pero aún en las provincias españolas
hay sus más y sus menos. Las Castillas
dan á muy buena pasta las chiquillas,
y alguna hay tal que á Venus se parece.
La soberbia Aragón, que resplandece