PRINCIPIO DE RELATIVIDIAD 109
una masa y se propaga a través del espacio vacío a la manera de las partículas luminosas de Newton.
24. Al trazar el bosquejo de la Mecánica clásica señalé ($ 5) el gran interés que ofrece el principio de Hamilton, que tija el proceso según el cual un sistema pasa de un estado determinado, correspondiente al tiempo £,, a otro también definido que adquiere en el tiempo f, mediante la condición
3/ Hat =0,
donde H = T—W. En la nueva ciencia existe un principio equivalente, cuya única diterencia con el anterior estriba en que no figura en H la energía cinética propiamente dicha, sino la función
¡EA ce e T =>mo*—T= mc] 1—(1- '
Cc?
frecuentemente llamada función recíproca de T. Notoriamente, en primera aproximación, T" se reduce a
5 3 mp 4?, y ello prueba que el principio de la Me cánica clásica es un caso particular de éste, que atribuye a H el valor T"—W.
259. En este camino que vamos siguiendo corresponde ahora ocuparnos de la aplicación del principio de relatividad a los fenómenos electromagnéticos. Este principio requiere, según he repetido frecuen-