Pero quiero decir a los compañeros dirigentes sindicales aquí presentes, que si bien no hemos pagado ni pagaremos indemnización a alguna de estas empresas, nos hemos hecho cargo, y el estado chileno es responsable de los créditos que estas empresas contrataron para sus planes de desarrollo productivo, que por lo demás fracasaron. Chile tendrá que enfrentarse a la responsabilidad de pagar más de 726 millones de dólares, que son las deudas de estas empresas, que no reinvirtieron utilidades para ampliar la producción, sino que contrajeron créditos y se llevaron las utilidades. Esta es la dura realidad que confrontamos. Pagaremos esos créditos, pero no pagaremos indemnizaciones a las empresas imperialistas. (APLAUSOS)
También se nos combate por razones políticas, porque los trabajadores chilenos abren un nuevo camino a la emancipación de nuestra patria, y la vanguardia de los trabajadores es por cierto la clase obrera organizada, unida sindical y políticamente y que tiene el respaldo masivo de vastos y amplios sectores nacionales, expresado en elecciones sindicales y en elecciones políticas.
Ello nos da derecho a avanzar en el cumplimiento de un programa que es automáticamente patriótico y nacional. Lo he dicho y debemos repetirlo: "El Gobierno que presido es un Gobierno de transición al socialismo, Chile vive el proceso de la construcción socialista, pero somos un país capitalista. Este Gobierno enfrenta las dificultades y las contradicciones de un capitalismo agonizante, y no tiene ninguna de las ventajas del socialismo.
Mi Gobierno es un Gobierno democrático, pluralista, revolucionario y nacional, para abrir camino al socialismo. El socialismo no se impone por Decreto. El socialismo lo construíremos con el sacrificio, el esfuerzo y la generosidad de los trabajadores chilenos. La revolución -lo he dicho y lo reafirmo- se defiende y se construye trabajando más, estudiando más, sintiendo más la tradición de la historia, siendo cada vez más patriotas y teniendo un profundo sentido nacional para hacer de Chile un país dueño de su propio destino y soberano en sus propios caminos (APLAUSOS).