LECTURAS VARIADAS 299
el fin que se han propuesto; en cada una de estas agru- paciones se destacan algunas figuras culminantes que buscan no sólo el provecho práctico sino la realización de un ideal, el cual, con frecuencia, consiste en dotar a un país de aquello que le falte para ponerlo al nivel de estados más prósperos; eso, cualquiera que sea la forma en que se manifieste, se llama patriotismo; y si me pre- guntarais qué es un patriota, os contestaría : considero como tal a todo ciudadano que contribuya de algún modo a la florescencia de su país.
La República Argentina ha tenido la felicidad de contar con gran número de hombres notables por su desprendimiento, y a ello debe el ser hoy la primera nación de Sur América; tomemos al azar una agrupación, la de los artistas, por ejemplo, y veamos su obra.
Hace más o menos 40 años se fundó la Sociedad « Es- tímulo de Bellas Artes », la cual llevó al principio una vida precaria; empero, gracias a la abnegación de varios artistas que dieron clases gratuitas, la Escuela se sos- tuvo y empezó a prosperar, aumentando cada año el número de alumnos, hasta que llegó a ser hoy la renom- brada Academia Nacional de Bellas Artes.
No mencionaré el nombre de los maestros que aun viven, pero creo justo deciros que el malogrado Angel Della Valle sacrificó allí, durante quince años, sus noches y parte de sus días a la enseñanza de dibujo. y pintura. La muerte le sorprendió en plena labor, momentos antes de empezar la «clase. El pintor Eduardo Schiaffino lo despidió en la última morada con las siguientes palabras :
« Della Valle no fué bastante egoísta para vivir. Era un alma de niño que habitaba la ruda envoltura de un atleta. Era bueno, de una bondad inagotable; era leal cómo la lealtad misma. He sido su compañero y su co-
