Página:Correspondance de Guillaume le Taciturne, prince d’Orange, 1857.djvu/148

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ántes ; que aquella carta habia querido traer, para que le diese mas fee con ver que solo venia á hablarme, volviéndose luego, de lo cual haria fee Balthasar de Burgos con dalle la respuesta de su carta ; que el servicio que él estaba resuelto de hacer, y otros tres compañeros suyos que tenian muy buen aparejo para ello, era matar ó atossigar al príncipe de Orange. Respondile que Su Magestad era tan gran principe y christiano y tan poderoso que no queria ni era necessario castigar á sus rebeldes por aquella via. Replicóme que lo sabia muy bien, y que el venirme á decir aquello no era sino solo para declarar su intencion, y que yo pudiesse hacer fee que aquel dia me lo habia dicho, y que le diese un contraseño para que, hecho el negocio, él me le pudiesse mostrar, el cual pensaba effectuar dentro de dos meses, que hasta entonces no queria ser remunerado, ni tener ningun premio dello, confiado de que yo seria parte para que se le diese conforme merescia su servicio. Sobre lo cual tube grandes pláticas con él, y me mostró cuatro ó cinco cartas sin sobrescripto del abbad de Sant Witumberg, cuya firma y sello yo conoscí, y del tenor dellas, aunque eran palabras desconocidas, que debe de ser hombre á quien el de Orange y los estados han tenido en la corte de Francia para que les advirtiese de lo que allá passaba, y de quien hacen confianza, y assí las cosas de allí, como las de Flandes, las tiene bien entendidas, apuntándome cosas de las dos partes muy vivas y de las pláticas que Franceses han tratado con los estados, y las de esta reyna. Tiene la lengua francesa y italiana, porque me dijo que era saboyano, y la latina, muy ladino en todas ; buena persona, aunque venia en ábito de mercader. Yo, después de haber hablado mucho tiempo con él, le remití para otro dia, y echándole espías, hallé ser verdad no solo el posar donde me habia dicho, y personas con quien habia tratado, pero lo que habia hablado con ellas ; y concluyendo con él partí un real español de columnas en tres partes, dándole las dos que serian contraseño de que yo no le podia negar el haberme significado lo que queria hacer : con que se fué, pidiéndome que, por lo que le podia succeder, escribiesse al príncipe de Parma que, si un hombre que tenia dos piezas de un real partido le en-