Página:DAlmeida Ciudad del Vicio.djvu/188

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FIATLTHO DD?

gas de camisa, cabeza amarra: Indias, chinelas de moro, un : —-¿Qué es, vejete? dije yo afligido. ¿Alguna cosa de cuid El rompió a llorrar, agarr aliento profundo... —No sé del pequeño, desd hijo desapareció... —Tranquilícese usted, no se le busca. Está por ahí ji


chiquillos de su edad. ¡Mat perdió de vista 21 amigo... Refirió aturdidamente que

temprano, había más gente e: tumbre, una algazara del inf: bres en confusión... Fuéa ho tó la mano de la criatura cuz pos; el caso fué que no le vió

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todos los rincones, mandó adelante, fué preguntando a


bían visto, corrió a la pol: zÓn de tal criatura... Paseaba desesperado por angustiosos y un peso en el y trágicos en torno del peque: robado los barqueros, tal ve guien le quería mal. —¿Quién ha de quererle 2 conocen siquiera, tranquilíce: una quinta; es lo que fué. Ya turas que le tomaron por 2:

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METIDA

'n un pañuelo de ear de sollozos. wendido de verle malas noticias?... 2 mí con un des-

ta mañana que mi

peligro; se perdió, en alguna casa con “simo! ¿Cuándo le

ía ido al baño muy daya que de cos- señoras y hom- con un amigo, sol- iba entre los gru-

. Anduvo aún por

ros por la playa y a otros si le ha- «lie supo darle ra-

iarto, con suspiros , forjando destinos ” podían haberle

riese ahogado, ak

al, hombre? Ni lo

$ a pasar el día a

que le llevó, cria- y no le dejaron