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Página:Diccionario araucano-español y español-araucano.djvu/17

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XI
ADVERTENCIAS PREVIAS

haber amado. Sin embargo, en el Diccionario casi siempre hemos empleado en castellano el simple infinitivo, tanto por seguir la costumbre ya establecida, como también para no hacer la traducción en extremo circunstanciada.

3.— Verbos transitivos.

Nos permitimos recomendar a las personas que hayan de usar el Diccionario, que se penetren bien de las reglas relativas a los verbos transitivos establecidas en nuestra Gramática (págs. 60 y siguientes), porque si no tienen presente esas reglas, a menudo no les será fácil entender los ejemplos con que hemos ilustrado el régimen de los verbos. Según podrá verse, por lo general hemos preferido en dichos ejemplos las construcciones transitivas de segunda clase, a fin de aclarar las dificultades que éstas ofrecen.

Las construcciones transitivas de segunda clase (que corresponden en castellano a las de los verbos que rigen dativo y acusativo a la vez), se forman comunmente agregando a la raíz de los verbos simplemente transitivos las partículas l, el, lel, ñma, ma etc. (V. Gramática, pág. 61). Tales formas secundarias del verbo (p. e. küpaleln o küpalman, derivadas ambas de küpaln traer) no pueden figurar en el Diccionario como verbos propios, porque exigen forzosamente la interposición de partículas de transición en la voz activa (V. Gramática, pág. 66). Lo mismo hay que decir de unos pocos verbos raíces que son de los transitivos de segunda clase, sin que puedan reducirse a un transitivo de primera clase, según pág. 61, 2.º de la Gramática, tales como elun, areln, meʃan. Si estos últimos figuran en el Diccionario sin transición, los hemos puesto así solamente por razones prácticas, ondescendiendo con el modo de pensar en gramática, de los indogermanos, pero en realidad no son sino formas hipotéticas que el araucano no puede entender. Preguntado el indígena: «¿Qué significa elun?», no contestará: «Dar», o «Di», o «He dado», no lo entiende, ni puede entenderlo. Si es algo instruido, tal vez lo admite como forma refleja del verbo transitivo eln poner (éluwn o élivn), aunque mal pronunciada. Mas cuando se le pregunta viceversa: «¿Qué significa «dar, dí, he dado» en tu lengua?», él dirá: «Wɘln», o sea «Ruln» si es de Panguipulli.

Los gramáticos antiguos erraron o no eran felices en escoger «elun dar» como paradigma del verbo, en cuanto lo tomaron como tal para la voz activa. A lo menos hoy día, su presente «elun, eluimi, elui» etc. no significa nada. El ante-copretérito «elufun, elufuimi, elufui» etc. significa algo, menos la primera persona, a saber: Elufuimi le habías dado, elufui le había dado, y así adelante, porque elufuimi equivale a elufufimi con elisión de la segunda f por evitar la cacofonía fufi. Lo mismo vale del pospretérito. La primera persona singular del futuro es, según aquellos gramáticos «eluan daré»; pero el indígena entiende «Me darás», contracción de eluaen. Eluaimi no es «darás», conforme dicen las gramáticas, sino «yo te daré», contracción de eluaeimi (forma de transición que se usa en el sur). Eluai y siguientes no se entienden etc. etc.