en la Universidad de San Marcos y de abogado en la Real Audiencia. Regresó á Chile y se ordenó sacerdote en 1740. Poco después obtuvo por oposición la canongía de la Catedral. Habiendo fallecido el Obispo González Manuolejo, filé consagrado en ese rango el 2 de Octubre de 1755, en Concepción, parala diócesis de Santiago. Ocho anos después de recibir la mitra (1763), reunió los párrocos de su diócesis para celebrar un sínodo, el sesto que ha tenido lugar en Santiago. En 1765 concurrió al Concilio Provincial de Lima, convocado por el Arzobispo Diego Antonio de la Parada. Allí presentó su célebre obra titulada: Disertación sobre, las verdadtrasy legítimas facultades del Concilio Provincial. Dicha producción le valió el diotado de Ambrosio de las Indias. Visitó tres veces su diócesis. Se distinguió como orador sagrado. Fue el vigésimo Obispo chileno del tiempo de la conquista. Continuó la construcción de la Catedral, empezada por González Marinolejo, para enya obra destinó la suma de cien mil pesos. Murió en su diócesis, en 1788. Por su ciencia y virtudes, fue uno de los príncipes de la iglesia chilena.
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ALDEA («juan De Dios).—Sargento de la guarnición de la EsmtraLla, que murió con gloria y heroísmo en la cubierta del monilorperuano Huáscar, junto al capitán Prat, en el memorable combate naval de Iquique del 21 de Mayo 1879.
ALDÜNATE (José Santiago).—Benemérito general. Nació en Santiago en 1790. Se educó en los colegios más distinguidos do Bu época, pues pertenecía á una rica familia. A los 14 años se enroló en el egército, de alférez, en el regimiento de milicianos dcRancagua (13 de Octubre de 1810). Hizo las primeras campañas del sur, á las ordenes del general don José Miguel Carrera. En 1813 se encontró en la batalla de San Carlos y en el sitio de Chillan. Como capitán del batallón de Granaderos de Chile, peleó en Quito (19 de Mayo de 1814), bajo las banderas del general Bernardo O'Higgins. Después de la batalla de Chacabuco formó parte del egército'de San Martín. En 1820 hizo la expedición al Perú. Fue condecorado en Lima por sus hazañas, con la orden del Sol. Habiendo bteho la campaña al sur del Perú (1822), cayó hwi.io y prisionero en la batalla de Macacona •.7 4e Abril). Tenía á la sazón el grado de coron*L Más tarde fue canjeado por el rnarquéz de Valle Hermoso. Desde 1823 hasta 1824 formó en la* filas del egército de Chile en el l'erú. De rcjireso, se le nombró Intendente de Chiloé. En 1827, se le ascendió á general de brigada. Diez años después, en 1837, fue al Perú, en la expedición restauradora comandada por el general Blanco Encalada, como jefe de Estado
Mayor. Se retiró del servicio en 1830. A mediados de Agosto lo nombró Ministro de Guerra y Marina el General Bulnes. Retiróse do ese puesto en 1845, para ir á desempeñarla Intendencia de Valparaíso. En 1847 se le nombró Director de la Escuela Militar, puesto que dejó en 18<>1 para ir á ocupar la Intendencia de Coquimbo, y fue Senador de la República. Falleció el 21 de Junio de 1864, llorado y bendecido por el país.
ALDUNATE (ignacio).—Abogado. Egerco su profesión en Quillota. Es respetado por Bu ilustración y honradez.
ALDUNATE (federico).—Capitalista, político y diputado en la legislación de 1882.
AL RÚÑATE BASCUÑÁN (roberto).—
Joven guerrero. Nació en Santiago e) 4 de Enero de 1859. Era nieto del ilustre general don José Santiago Aldunate. Adquirió su primera educación en el Instituto Americano de Valparaíso y en el Instituto Nacional de Santiago. Fin 1872 ingresó á la Academia Militar, en calidad de cadete efectivo. En 1876 fue nombrado teniente abanderado del 4.° de línea. Como rasgo distintivo del noble carácter de tan ilustre mancebo, debe recordarse que en 1877 rindió un lucido examen de filosofía que reveló la precocidad de su talento. Al mismo tiempo que penetraba los secretos del arte do la guerra y de la ciencia, de los misterios y los fenómenos de la conciencia humana, descubría también las bellezas de su alma en el estudio de la pintura en la Academia de Pintura, bajo la dirección inteligente del maestro Mochi. La guerra del Pacífico lo arrastró á los campamentos cu 1879. En su batallón emprendió la campaña del norte, hasta que una bala lo hirió de muerte en la batalla de Chorrillos. A consecuencia de esa herida, falleció en Valparaíso, después de dolorosísima operación, en la nocho del 26 de Panero de 1881.
ALDUNATE BASCUÑÁN (carlos)—Soldado valeroso, hermano del anterior. Aunque más joven, pero como miembro do una familia de gloriosos militares, tenía en su alma los mismos bríos. La guerra del Pacífico lo encontró dispuesto al sacrificio y se inmoló en aras de la patria en la batalla de Chorrillos, en el rango de teniente de artillería.
ALDUNATE BASCUÑÁN (santiago}.— Abogado. Nació en Santiago en 1859. Se educó en el Instituto Nacional, lia sido profesor de historia de la Escuela Militar, vico-director de la Escuela Abrahum Lincoln y secretario de la Sociedad de Instrucción Primaria. Actualmente ocupa un banco en la Cámara do Diputados, como representente suplente del departamento de Constitución.
ALDUNATE Y CARRERA (Luis).—Eminente hombre público. Nació en Santiago en Mayo de 1842. Fueron sus padres el distinguido caballero don Ambrosio Aldunate y la respetable matrona doña Rosa Carrera. Huérfano de padre á una edad muy corta y envuelta su familia en prolongadas y dispendiosos litigios que le arrebataron la posesión de cuantiosos bienes, hubo de dedicarse desde sus más tiernos años á la doble tarea del trabajo y del estudio. Adquirió su educación en el Instituto Nacional. Re graduó de abogado en la Universidad en 1863. Ese mismo año fué nombrado secretario de la Intendencia de Santiago, que la desempeñaba el eselarecido político don Federico Errázuriz, puesto que sirvió hasta 1865. A fines de ese año salió de Chile, en la misión extraordinaria que llevó al Perú don Domingo Santa María, con ocasión de la guerra con España. Tuvo el honor de redactar en Chincha Alta las bases del pacto de alianza con el Perú, extendido después á las repúblicas del Ecuador y Bolivia. En los primeros días de 1866, marehó á los Estados Unidos, con el título de oficial del secretario de la Legación de Chile, cuyo jefe inmediato era el señor Francisco Solano Asta-Buruaga. En Nueva \ork, fué redactor, traductor, repórter y corrector de pruebas del periódico La Voz de América, que fundó Benjamín Vicuña Mackenna para prestigiar la causa de las repúblicas del Pacífico. A mediados de esc año se dirigió á Enropa y regresó al finalizar el mismo año. A su regreso, se dedicó al egereicio de su profesión del foro. Poco después se le propuso para diputado al Congreso por el departamento de Curicó; pero los disentimientos que por aquella época estallaron entro los hombres del poder y el antiguo jefe de la legación de Chile en el Perú, envolvieron al señor Aldunate en una atmósfera de recelos y desconfianzas que cubría á todos los amigos políticos y personales del ilustre ciudadano don Domingo Santa María: cansas que le impidieron ingresar por entonces al parlamento. En el último año de la administración de don Federico Errázuriz (1875-1876), fué nombrado miembro de la comisión revisora del Código de Procedimientos Judiciales. Las elecciones de 1876 le dieron un puesto en la Cámara de Diputados, por el departamento de San Fernando. En esc período legislativo presentó el proyecto de ley de contribución de herencia. Reelegido diputado en 1879, sostuvo en la Cámara un largo y luminoso debate con motivo de la indicación de Justo Artcaga Alemparte para anexarse á Tarapacá, antes de la batalla de Calama, como así mismo en la interpelación Balmaceda, José Manuel, en 1870, sobre las conferencias de
Arica y la campaña á Lima. Con ignal vigor de carácter defendió la candidatura Santa María en 1881, para primer magistrado. El 18 de Septiembre de ese año, fué nombrado Ministro de Hacienda por el jefe del Estado don Domingo Santa María. Siete meses ocupó ese cargo, y en esc corto espacio de tiempo, amortizó, en medio de las exigencias de la guerra, siete millones de pesos de la denda, redimiendo al Estado de una gravosa condición económica. Pasó á desempeñar entonces la cartera de relaciones exteriores. En ese puesto, liquidó las responsabilidades de la guerra con el Perú y Bolivia; celebró la paz con España y convenciones de arbitraje con Francia, Inglaterra é Italia; puso honroso término á las gestiones de mediación de los Estados Unidos; finiquitó el pacto de tregua con Bolivia y fué á Ancón, en 1884, á suscribir el tratado de concordia. En ese mismo año se retiró del gabinete para ocupar el alto puesto de abogado de Chile en los Tribunales Arbitrales. Allí, sosteniendo la pureza y la integridad de la patria, dió infinitas pruebas de su habilidad profunda de consumado jurisconsulto. En las elecciones de presidente de la República, en 1886, la Convención Radical le dio numerosos votos para su candidatura, honor que deelinó en favor de don José Francisco Vergara. Elegido Senador por la provincia de Tarapacá en las elecciones de 1886, ha demostrado en las controversias parlamentarias muy escepcionales dotes de orador y nobles prendas de carácter y patriotismo. Los discursos sobre la incorruptibilidad de la administración pública, sobre la libertad de sufragio, los empréstitos industriales, la inversión de los caudales nacionales, que pronunció en la tribuna del Senado, en el período de sesiones de 1887, lo han colocado á la altura de los más eselarecidos estadistas del país. Por sus conocimientos forenses ha sido designado miembro de la Rcal Academia Española y de otras corporaciones científicas de Enropa y América. Amante del progreso de la República en todas sus manifestaciones, ha acometido empresas beuéficas en las cuales ha embareado toda su fortuna honradamente adquirida en el trabajo intelectual permanente de más de veinte años. Su filantropía ha iluminado con el consuelo, más de un hogar oscurecido por la desgracia. Laboriosas inteligencias le son dendoras del estímulo generoso que en secreto les ha ofrecido con su mano bienhechora. El señor Aldunate está llamado á influir en los destinos futuros del país, por su elevación de miras y de inteligencia, por su patriotismo, su ilustración y sus ejemplares cualidades de hombre de Estado.
ALDUNATE DE O'HIGGINS (josefaj— Virtuosa y caritativa matrona. Nació en Santiago en el seno de respetable hogar, Cd 177»
