Página:Dies iræ (1920).djvu/149

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página ha sido corregida
149

empezó a escupir sangre y no pudo ya beber, fué su mujer la que se entregó a la bebida y contrajo el vicio del "vodka". Desde entonces, la madre de Sachka se vengaba cruelmente de lo que la había hecho sufrir aquel hombre de pecho angosto, que acostumbraba a usar palabras incomprensibles para ella, que perdía todos los empleos, que llevaba a menudo a casa tipos como él, melenudos y desdeñosos. Mientras que su marido, a causa del "vodka", cada día estaba más débil, ella, por el contrario, cuanto más bebía se ponía más gorda y adquiría más fuerza en los puños. Ya no se cuidaba de Ivan Savich, decía cuanto le venía en gana, llevaba a casa hombres y mujeres de la vecindad y cantaba en su compañía canciones frívolas. Su marido, entretanto, estaba acostado en le poële, al otro lado del tabique, acurrucado, silencioso, pensando en las injusticias y en los horrores de la vida humana. Ella se quejaba a todo el mundo de su marido y de su hijo, que, según decía, eran sus peores enemigos, y tan granuja y tan canalla uno como otro.

Un rato después, la madre le decía a Sachka:

—Pues yo te digo que irás a casa de Svechnikov.

Acompañaba cada palabra de un puñetazo en la mesa, en la que chocaban, unos contra otros, los vasos.

—¡Y yo te digo que no iré!—replicó fríamente Sachka, sintiendo un violento deseo de enseñarle a su madre los dientes, mueca a que era muy dado