decir al hombre, la competencia de la ley natural: pero definiendo esta ley, cada uno á su modo, la establecen todos sobre principios tan metafísicos, que se hallan, aun entre nosotros, muy pocas personas en estado de conocer estos principios, y muy distantes de poder hallarlos de sí mismos. De suerte que todas las definiciones de estos sabios, casi en perpetua contradiccion sobre ellas, se hallan de acuerdo solamente en esto: que es imposible entender la ley de la naturaleza, y por consecuencia el obedecerla, sin ser un gran investigador y un profundo metafísico: lo cual significa justamente, que los hombres han empleado, para el establecimiento de la sociedad, luces que no se descubren, ni se manifiestan sino á fuerza de un inmenso trabajo, y á muy pocas personas, aun en el seno mismo de la sociedad.
Conociéndose tan poco la naturaleza, y acordándose tan mal sobre el verdadero sentido de la voz ley, será casi imposible el convenir de una definicion exacta de la ley natural. De forma